Los graves atentados a las ya escasas libertades que en estos últimos días han llegado hasta nosotros, amazighes de Catalunya, originarios de Marruecos, sobre los sucesos qué ocurrían en diversas universidades de Marruecos (Meknes, Agadir, Errachidia, Marrakech y otras), en las que notorios panarabistas -partidarios de la exclusión y asimilación forzada a la llamada nación árabe, y por tanto opuestos a cualquier reivindicación democrática encaminada al reconocimiento de los mínimos derechos del pueblo amazigh- perseguían con saña a los estudiantes simpatizantes con la causa berebere, hiriendo a muchos de ellos, llegándose a producir una muerte, todo ello ante la pasiva mirada de la policía marroquí, han causado gran alarma en la comunidad.
La misma policía, que había cerrado los ojos ante la violencia, detenía a numerosos estudiantes amazighes, registraba sus domicilios y se empleaba a fondo en sus conocidos métodos de tortura, preparando procedimientos judiciales sin prueba alguna contra las víctimas, sobre las que pueden recaer duras penas de cárcel.
También aquí en Barcelona, y con total impunidad, un ciudadano marroquí militante amazighista, beberista, fue secuestrado en plena calle este último sábado e interrogado durante toda una noche, supuestamente por la policía marroquí.
A día de hoy continúan las detenciones arbitarias. Estos hechos no son algo aislado sino que buscan golpear duramente al movimiento amazighista, uno de los movimientos más dinámicos en la sociedad marroquí, que impulsa el avance hacia la democracia en Marruecos, inconcebible sin el reconocimiento de los derechos sociales, económicos y políticos del pueblo berebere, sin el respeto a su personalidad, a su lengua y su cultura, y el fin de su marginación histórica.
Marruecos hoy es un aliado privilegiado de España y de la UE es su política africana. El apoyo a tal Régimen dice mucho de una política continuadora del pasado colonial que pretende utilizar a nuestro país no como locomotora de un desarrollo propio, sostenible, que frene la necesidad de emigrar sino todo lo contrario, como Gendarme de la zona, que reprime por encargo a las personas migrantes, y a su propio pueblo, como es el caso, en estos momentos, de la comunidad Amazigh. Ante estos atentados, no sólo contra el pueblo amazigh, el pueblo originario del norte de África constituido por amplísimos sectores de la población, sino también, contra la totalidad del pueblo marroquí ansioso de libertad.
LLAMAMOS A UNA CONCENTRACIÓN EN LA PÇA.DE SANT JAUME (Barcelona) EL PRÓXIMO SÁBADO DÍA 9 a las19H.
El pueblo amazigh tiene derecho al reconocimientos de su identidad, de su lengua, de su cultura, a sus derechos sociales, económicos y políticos, a salir de su marginación. · La lucha por la consecución de las libertades del pueblo amazigh y las del conjunto del pueblo marroquí es indivisible. · Denunciemos la actuación de los escuadrones panarabistas con la complicidad del régimen dictatorial. · Detengamos la represión policial, la tortura y la muerte. · Liberación inmediata sin cargos, de todos los detenidos y cese de la violencia en las universidades. Exijamos el fin de la actuación de la Policía marroquí en territorio español.
La Haine
En la imagen superior el estado en que quedó el panel de escritura libico-bereber, abajo el panel antes de ser hecho añicos por los desalmados.
La estación rupestre del Macizo de Balos, en la isla de Gran Canaria, uno de los yacimientos más importantes del pasado precolonial de Canarias, fue atacado este viernes, quedando destrozado uno de sus paneles más interesantes según los especialistas. Este grave crimen contra la identidad del pueblo canario fue llevado a cabo según diversas fuentes por varias personas que la emprendieron a golpes con el importantísimo yacimiento arqueológico, destrozando brutalmente un panel grabado de un metro cuadrado de superficie, que contenía figuras geométricas y un texto en escritura libico bereber de los antiguos canarios.
